Alejandro Turriziani Álvarez, con solo 16 años, acaba de participar en la Davis Cup Junior como parte del equipo español capitaneado por Carles Vicens e integrado por Daniel Mérida y Daniel Rincón. Este año la copa se ha disputado en Orlando, FL.

Hoy hablamos con él para que nos cuente cómo ha sido esta experiencia tan especial y para descubrir cómo vive su día a día como jugador de tenis en la Academia de Tenis Juan Carlos Ferrero-Equelite, donde entrena duro para llegar a ser profesional.

Pregunta: ¿Cómo llegaste al mundo del tenis?

Respuesta: Desde pequeño, siempre que veía una pelota empezaba a pegarle con la mano. Cuando no tenía una, simulaba el golpe, por lo que mis padres decidieron apuntarme a clases de tenis. Empecé muy chiquito, a los 4 años.

P: ¿Qué te trajo a Equelite y cuándo fue?

R: Llegué a Equelite el 2 de septiembre del año pasado. Desde pequeño he sido un jugador disciplinado. Por desgracia, viví una época en la que me hicieron perder toda la disciplina y la confianza en mí mismo. Me encontraba en un ambiente que no me favorecía como jugador ni como persona; sentía que no me tomaban en serio ni me respetaban. Conseguí dejar este lugar gracias a una invitación para entrenar en CAR, un Centro de Alto Rendimiento de Barcelona. Tras pasar un año allí, CAR cerró sus puertas, por eso vine a probar a la Academia. Me gustó tanto que mis padres no dudaron en inscribirme. ¡Y aquí estoy!

P: Recientemente has jugado la Davis Cup Junior, háblanos sobre esta experiencia:

R: Sí, hace poco jugué la Davis Cup Junior. Fue una experiencia única. Poder participar en una competición del calibre de la Davis Cup Junior y representar a mi país es algo que nunca se me va a olvidar. Allí era todo espectacular, a cualquier sitio que ibas te trataban muy bien, tenías todo lo que querías… El lugar en el que se realizó la competición era un Campus americano enorme. La verdad es que todo muy bien. Además tuve la suerte de poder jugar en tierra americana, que es como la tierra batida pero de color verde. Hasta ahora nunca había jugado en esta superficie y disfruté probando algo nuevo.

P: ¿Qué proyectos te esperan ahora? ¿Cuáles son tus objetivos para lo que queda de año? ¿Qué expectativas tienes para la próxima temporada?

R: Me queda poco para acabar la temporada. Lo que queda jugaré algunos ITF y si puedo algún Future por Valencia. Mi objetivo para lo que queda es tratar de jugar todos los partidos que pueda y conseguir el mayor número de puntos posible. Para la próxima temporada me gustaría dar un gran paso adelante y poder ponerme arriba en el ránking ITF para poder entrar a algún Grand Slam y jugar varios Futures.

P: Cuéntanos un poco cómo te preparas para seguir avanzando.

R: Me preparo trabajando duro día a día y siempre intentando aprender algo nuevo de la mano de mi coach, Francisco Peñalva, que siempre se implica en mi crecimiento como jugador y como persona.

P: ¿Cómo es el ambiente en Equelite? ¿Qué se siente cuando te prepara un número 1 del tenis?

R: El ambiente en Equelite es increíble. Se respira tenis por donde vayas, el nivel de esfuerzo y de rendimiento son los mejores que he visto y, aun así, nos sentimos todos como en casa y siempre tenemos alguien a quien acudir si tenemos algún problema. Tener a un número 1 del mundo allí te motiva mucho. Siento que aprendo mucho de lo que me dice y su ayuda me sirve de mucho. Juan Carlos es un ejemplo a seguir para todos nosotros.

P: ¿Cuál es tu mayor sueño como tenista? ¿Adónde te gustaría llegar?

R: Mi sueño, desde que era pequeño, siempre ha sido ser tenista profesional. En el caso de llegar arriba me gustaría estar en el top 10, pero queda mucho para eso; no nos adelantemos jajaja.

P: ¿Crees que necesitas sacrificar muchas cosas para luchar por este sueño? ¿Cambiarías algo de tu vida en estos momentos?

R: Claro que necesito sacrificar muchas cosas por mi sueño, pero no me importa hacerlo porque esto es lo que de verdad quiero. Ahora mismo no cambiaría nada de mi vida. Disfruto cada día con lo que hago y soy feliz intentando mejorar como tenista para alcanzar mis metas.

P: Si no fuera el tenis, ¿qué sería?

R: Nada. No imagino mi vida sin el tenis.

Está claro que Alejandro tiene las cosas muy claras y unas metas muy marcadas. Estamos seguros de que, si continúa por este camino, alcanzar lo que se proponga. Tenemos la suerte de contar con jóvenes tan excepcionales como él en nuestra academia que no solo aprecian y respetan el juego y la técnica del tenis, sino también sus valores éticos y morales.

¡Ánimo, Turri!